La educación de los hijos va más allá de enseñarles a hablar, leer escribir, sumar o restar. Como padres tenemos la responsabilidad de formar personas felices y completas que contribuyan a mejorar la sociedad en la que viven y el primer paso para lograr seres humanos de bien es la educación en valores.
Tal vez te preguntes cuál es la mejor forma de empezar a introducir a tu pequeño o pequeña en la vivencia de los valores humanos, así que por ese motivo te compartimos tips para que estos principios estén siempre presentes en su desarrollo.
Cómo inculcar valores a los niños
Ejemplo
Nuestro papel como papás es fundamental, ya que aquello que demostremos con acciones en nuestro día a día, será lo que generará mayor impacto en nuestros hijos. Durante sus primeros años de vida, los padres tenemos que estar atentos a ser la mejor versión de nosotros mismos con ellos y con todas las personas, para así realmente vivir los valores que queremos enseñar en carne propia.
Si como modelo nos mostramos pacientes, tolerantes y siempre respetuosos de los demás, nuestros niños crecerán con un ejemplo de paciencia, tolerancia y respeto que poco a poco harán suyo.
Utiliza historias y narraciones
Una gran forma de representar situaciones de la vida cotidiana y el correcto uso de los valores es a través de historias. A todos los niños les encanta escuchar un cuento y sentirse los protagonistas de una aventura. Así que usa tu imaginación o apóyate de un libro para sumergirte con ellos en una historia que atienda el valor que quieres fortalecer.
Al hacerles preguntas como “¿Qué crees que hará el protagonista?” o “¿Crees que estuvo bien lo que hizo?” Tendrás la oportunidad perfecta para demostrarle la importancia de vivir valores como la honestidad, la gratitud o la responsabilidad.
Explícales por qué
Los niños son muy listos y su mente está ávida de conocer el mundo. En ocasiones cometemos el error de creer que hay cosas que no pueden comprender y preferimos educarlos respondiendo a sus dudas: “porque sí” o “porque eso es lo correcto”.
Dedícales tiempo a sus cuestionamientos y aprovecha para explicarles la importancia de los valores y por qué son lo correcto. Hacerles ver el punto de vista de los demás es la mejor forma de generar en ellos la empatía y la generosidad.
Reconoce sus acciones
No se trata de comprarles algo siempre que actúen correctamente, pero es vital que los padres reconozcamos verbal o afectivamente las buenas acciones de nuestros hijos. Hacer énfasis en lo que estuvo bien y felicitarlos generará una sensación de satisfacción en ellos y los hará saber que van por buen camino.
Por el otro lado, cuando no vivan un valor o desobedezcan, más que ser severos, el crear conciencia en ellos de las consecuencias de sus actos y explicarles por qué lo que hicieron estuvo mal, provocará en ellos una verdadera intención de cambio.
De la mano con la escuela
Otro punto sumamente importante que tienes que cuidar, es la coherencia entre los valores que se viven en casa y en el Kinder. Si tu hijo o hija recibe mensajes contradictorios sobre cómo tiene que actuar, la confusión no lo dejará desarrollar una adecuada identidad de principios.
Por eso es fundamental que el Kinder que escojas para tus pequeños vaya de la mano con tus creencias y valores familiares. Así en la escuela los niños reforzarán lo que viven en casa y crecerán con valores y virtudes aún más sólidos.
Si cuidas todos estos aspectos y estás atento al desarrollo de tu hijo o hija, no tienes de que preocuparte. El inculcarles valores a los niños es un trabajo del día a día que toma su tiempo, pero que llevado adecuadamente, formará personas equilibradas y firmes en sus principios; lo que quizá es el aspecto más importante de la educación de tus hijos.