La importancia de crecer con virtudes
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La importancia de crecer con virtudes

Virtudes y valores no son lo mismo, la diferencia es que el valor se refiere a comprender lo que nos hace mejores, mientras que la virtud se enfoca a la puesta en práctica de los valores. Es decir, hacer vida los valores diariamente. Para el Colegio Álamos lo importante es crecer en virtudes para ser felices.

Puede sonar confuso, pero te lo explicamos. Para nosotros, instruir en virtudes es proporcionar a nuestros alumnos una educación más trascendental en su vida. Por ello, formamos hombres que guían su vida motivados por convicciones propias y no solamente por seguir reglas.

 

Imagina estos tres escenarios:

 

  • En el primer escenario: tu hijo está haciendo su tarea porque, de lo contrario, no podrá ir a la fiesta de su mejor amigo.
  • En el segundo escenario: está haciendo su tarea porque prometió a su preceptor que lo haría.
  • En el tercer escenario: tu hijo está estudiando porque quiere ser un gran médico y ayudar a los demás.

 

La diferencia radica en que la motivación en los primeros dos escenarios es efímera y se enfoca en las cosas que se tendrán como resultado. Por el contrario, en el tercer escenario, la motivación es propia, con una meta personal que durará para toda la vida.

 

"Deja para memoria, no la imagen de tu cerebro, sino la imagen de tu virtud".
- Isócrates

  

¿Educar en virtudes o valores?

 

Un joven con valores sabe que actuar de cierta forma le traerá buenas consecuencias o le creará una buena imagen; entonces actúa conforme a la regla para obtener esos beneficios. Finalmente, su conducta se convierte en un actuar a conveniencia, pues dependiendo la circunstancia es como se actúa.

 

Usualmente, el valor es motivado por un conocimiento intelectual. Es decir, tu hijo hace la tarea porque sabe que de esta forma podrá ir a la fiesta de su mejor amigo.

 

Pero un joven con virtudes tiene la mira en acercarse lo más posible a la perfección, tiene la intención de agradar a Dios y crecer a su semejanza. La virtud se pone en práctica a diario sin importar la circunstancia, lo hace crecer como persona, lo perfecciona y lo edifica por ser algo habitual y permanente.

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En el Colegio Álamos nos interesa ser un colegio para niños donde la educación en virtudes sea una tarea constante, sin descanso ni fecha de caducidad, porque, para nosotros, nuestros alumnos modelan su comportamiento con el 99% de las cosas que ven, y es en el colegio donde pasarán la mayor parte de su día.

 

Por ello, tenemos la meta de educar a tu hijo como persona, ayudarlo a madurar y adquirir virtudes que lo hagan feliz.

 

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