El mundo actual requiere que los jóvenes estén cada vez más preparados, para lo cual necesitan orientaciones pedagógicas que los involucren de manera activa en la adquisición y construcción de sus aprendizajes.
El Active Learning es un enfoque en el que la educación está centrada en el estudiante, cuyo protagonismo se fomenta mediante trabajos colaborativos, herramientas de autoaprendizaje y proyectos interdisciplinarios.
En el caso del Colegio Álamos, los maestros propician el desarrollo de la responsabilidad y la autonomía de los estudiantes, quienes tienen aprendizajes significativos basados en el saber pensar, el saber ser y, especialmente, el saber hacer.
Asimismo, el Active Learning les enseña a los niños y jóvenes cómo aprender a aprender para que sean partícipes de su formación integral. Pero ¿cómo lo hace?
La reflexión es un proceso clave para el aprendizaje activo porque se basa en la experiencia y en la capacidad de conjeturar, lo que implica hacer las preguntas correctas de cada problema, y a partir de ello crear soluciones adecuadas.
De hecho, la reflexión necesita pasar por las siguientes dimensiones para que las acciones que se lleven a cabo tengan mayor sentido, sustento y alcance:
Cabe mencionar que la reflexión en grupos pequeños permite a los jóvenes contrastar sus visiones, tener retroalimentación y tiempo suficiente para expresarse, lo que a su vez fortalece su capacidad para comunicarse de manera efectiva.
En el Colegio Álamos la formación Active Learning se pone en marcha con actividades como:
Además, de manera general el aprendizaje activo se fortalece a través de:
El fin último del Active Learning es que los estudiantes desarrollen todo su potencial y lo usen en dos instancias: en lo individual, para darle sentido a su vida; y en lo colectivo, para contribuir a la comunidad de la que forman parte.
Al ser activos en sus aprendizajes, niños y jóvenes pueden mejorar en sus áreas de oportunidad y potenciar sus capacidades intelectuales mientras actúan de forma innovadora.
De hecho, los estudiantes también pueden tener un desarrollo socioemocional activo, a fin de lograr autoconocimiento, autorregulación, empatía, compasión y comunicación asertiva.
Incluso, el aprendizaje activo ayuda a fomentar hábitos de alimentación y sueño, ejercicio, relajación, juego y meditación, actividades que permiten alcanzar y disfrutar de todo el potencial humano.
Las herramientas del aprendizaje activo son imprescindibles para que tu hijo tenga más y mejores oportunidades en el mundo laboral del siglo XXI.
Por eso, en el Colegio Álamos preparamos a tu hijo con la formación Active Learning, para que sea autodidacta, ágil y sepa adaptarse a distintos entornos, así como a tener seguridad en sí mismo para afrontar cualquier reto y no temer a los errores.
Fuentes
“Active Learning”. University of Minnesota. (s. f.). Retomado de: https://cei.umn.edu/active-learning
Huber, Günter. “Aprendizaje activo y metodologías educativas”. Ministerio de Educación y Formación Profesional. 2008. Retomado de: https://www.educacionyfp.gob.es/dam/jcr:14edd70f-c97a-4361-8757-ef0c83ce5bea/re200804-pdf.pdf
“Propuesta pedagógica”. Active Learning. (s. f.). Retomado de: https://www.activelearning.com.ar/propuesta-pedagogica
Anillo Vial Fray Junípero Serra No 1000, Col. Arboledas Querétaro, Querétaro.